El intérprete (y productor) actúa con las dos hijas y su esposa en esta comedia. Y le dejó el centro de atención a Sunny, su hija menor.
Antes de que alguien mencione la palabra nepotismo, ahora que Adam Sandler estrena en Netflix ¡No estás invitada a mi bat mitzvá!, en la que también actúan sus dos hijas y su esposa, recordemos que el actor de Un papá genial suele trabajar con amigos, tanto actores como directores.
O sea que a la hora de plantear un proyecto -Sandler tiene su propia compañía productora, Happy Madison Productions-, Sandler se rodea de gente conocida, con gustos afines y nadie puede dudar de sus méritos y capacidad.
Pero en ¡No estás invitada a mi bat mitzvá! Adam no es el protagonista, sino que le ha dejado el centro de atención a su hija menor, Sunny, quien interpreta a Stacy Friedman, una chica niña de 13 años que sueña con un gran bat mitzvah, en lo posible con estrellas de la música, mucha referencia a la ciudad de Nueva York.
La Torá (el libro de la ley de los judíos) le interesaría, pero no demasiado.
Como muchas quinceañeras por aquí, Stacy sueña despierta con la gran fiesta que va a dar, el día que “se convierte en adulta”. No lo hace sola, ya que cuenta con su mejor amiga desde que eran más pequeñas, Lydia (Samantha Lorraine) imaginando su fiesta, y la de ella. Una va a escribir el discurso de la otra, y la otra va a prepara el video de presentación de la primera.
Son como uña y mugre, dirían las Bobes de Stacy, están siempre juntas.
Por supuesto que para que la comedia entre en desarrollo tiene que tener un conflicto. Y la dificultad, el embrollo surge cuando Stacy, que ama sin decírselo a un compañero de su escuela hebrea, Andy (Dylan Hoffman), lo ve a él besándose con… su mejor amiga.
Y ahí es donde pronuncia la frase que da título a la película. A partir de allí, estarán los tira y aflojes para ver si alguna cede antes que la otra.
Igual, pasarán más cosas, pero mejor que lo descubran desde el sillón de sus casas.
Familia unita
Lo dicho, Sandler se rodeó de toda su familia, porque la hermana de Stacy, Ronnie la encarna Sadie, su hermana en la vida real. Adam es el padre, y llamó a Idina Menzel -la actriz que le prestó su voz a Elsa en las dos películas de Frozen-, su coprotagonista en Diamantes en bruto (Uncut Gems, otra de las muchas películas que firmó por contrato con Netflix), para que sea la señora Friedman.
Ah, y su esposa en la vida real, Jackie Sandler, es la madre de Lydia.
Corrido Adam del centro de la escena -pero reservándose unos cuantos gags-, es Sunny la que se abre camino como comediante. Ya participó en cuatro películas de su padre, y recientemente la vimos en Unos suegros de armas tomar (sí, en Netflix, producida por Adam).
La chica tiene desparpajo e indudables condiciones para la comedia, por lo que a no extrañarse si de aquí en más Sunny Sandler deja de ser conocida como la hija de, y se gana su nombre propio en Hollywood.
“¡No estás invitada a mi bat mitzvá!”
Buena
Comedia Estados Unidos, 2023. Título original: “You Are So Not Invited to my Bat Mitzvah”. 103’, SAM 13. De: Sammi Cohen. Con: Idina Menzel, Sunny Sandler, Adam Sandler. Disponible en: Netflix.