Este martes por la mañana, un automóvil chocó contra el guardarraíl interno y un poste de luz en Acceso Este, en Guaymallén, Mendoza. El violento accidente se produjo cuando el conductor agarró un charco de agua que se había formado por las intensas lluvias en la calzada, perdió el control, quiso hacer una maniobra para reincorporarse al tránsito e impactó contra los objetos viales. Finalmente, el hombre quedó detenido en el pasto, donde fue asistido por las autoridades.
El Renault Sandero quedó completamente destruido, ya que por el impacto perdió una de sus ruedas y las dos puertas del lateral izquierdo (la del conductor y la de atrás), y se partió al medio. Por su parte, la víctima de 45 años presentó heridas menores y estaba consciente, por lo que fue trasladada al Hospital Central, donde quedó internado.
Según señalaron las autoridades, el conductor llevaba el cinturón de seguridad puesto y se activaron los airbags, factores que ayudaron a que el impacto no haya sido fatal.
El hecho ocurrió este miércoles, alrededor de las 7.30 a la altura del predio de la Virgen. La víctima sería un trabajador de la salud del Hospital Español, según informó el diario UNO. Cuando la víctima fue asistida por médicos del Servicio de Emergencias Coordinado que llegaron al lugar, aportó los datos de familiares para que les avisaran de lo ocurrido.
Otro fuerte siniestro tuvo lugar la semana pasada en San Martín de los Andes, provincia de Neuquén, cuando una familia que circulaba por la Ruta Nacional 40 chocó contra una caballada.
Según las declaraciones de las cuatro personas que iban en el vehículo, la ruta estaba oscura cuando los animales aparecieron en el camino. En ese momento, el conductor se percató de la cercanía de la tropilla que pasaba por el lugar, por lo que redujo la velocidad hasta que los vio alejarse. Fue entonces cuando, al acelerar nuevamente, fueron sorprendidos por un último potrillo, que no había llegado a cruzar junto a los demás. El auto impactó de frente contra el animal, el matrimonio y sus dos hijos menores de edad sufrieron algunos golpes y la camioneta quedó destruida.
Tras llamar a emergencias, los pasajeros fueron asistidos por personal de Tránsito de la Policía y profesionales de la salud del Hospital Ramón Carrillo, donde fueron trasladados preventivamente.
LA NACION