PARÍS.- El partido de izquierda radical Francia Insumisa (LFI) presentó este sábado una propuesta de destitución del presidente, Emmanuel Macron, a quien acusa de “falta grave” a su “deber” por su negativa a nombrar a una primera ministra de la coalición Nuevo Frente Popular (NFP).
El procedimiento de destitución del jefe de Estado, regulado por el artículo 68 de la Constitución, es bastante largo y difícil de llevar a cabo, ya que al final sería necesaria la aprobación de dos tercios de los parlamentarios reunidos. Y eso mientras buena parte de la izquierda también se niega a sumarse a la iniciativa.
Después de haber llegado en primer lugar en las elecciones legislativas francesas, el Nuevo Frente Popular (NFP) esperaba el nombramiento de Lucie Castets como primera ministra. Pero Macron descartó el nombramiento, creyendo, después de una serie de consultas, que los demás grupos de la Asamblea Nacional desconfiarían de un gobierno del NFP. Y subrayó la necesidad de “estabilidad institucional”.
“La Asamblea como el Senado pueden y deben defender la democracia contra la tentación autoritaria del presidente de la República, que no sabemos dónde se detendrá”, indicaron los diputados de LFI en su propuesta de resolución. Según la jefa del grupo, Mathilde Panot, la propuesta fue “enviada a los parlamentarios”.
Su texto considera que el rechazo de Macron a nombrar a Castets “es una falta grave al deber de respeto de la voluntad expresada por el sufragio universal”, y argumenta que la alianza de izquierda encabezó las últimas legislativas (193 escaños).
“El papel del Presidente de la República según la Constitución no es hacer negociaciones políticas en la Asamblea Nacional. El artículo 8 de la Constitución no dispone que el presidente ‘elige a un primer ministro que le guste’. Dispone simplemente que el presidente de la República ‘nombra al primer ministro’”, añaden los diputados de LFI.
En ese sentido, Lucie Castets cuestionó este sábado, en una entrevista con el diario británico The Guardian, la táctica de dilación de Macron con respecto a su nombramiento: “Está intentando ser el jugador, el árbitro y el seleccionador al mismo tiempo y no solo está decepcionando a la gente, sino que la está resintiendo. Es increíble cómo el presidente actúa como si no hubiera elecciones”.
Agencias AFP y ANSA
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