La caída del tratamiento del Presupuesto 2025 en la Legislatura Bonaerense promete traer cola. Y la primera reacción de un furioso Axel Kicillof fue un comunicado acusando a sus opositores de goslpitas, y atribuyendo los problemas financieros de la Provincia a «las gestiones de María Eugenia Vidal, y a la nacional de Javier Milei». Como se sabe, este viernes la Legislatura no solo no avanzó con el Presupuesto, sino que se cayeron también los proyectos de Ley Fiscal Impositiva, que incluía fuertes subas, y el proyecto de endeudamiento que había presentado hace más de un mes la administración Kicillof.
A través de su cuenta de X, Kicillof señaló «el pedido de endeudamiento solicitaba autorización en lo estrictamente necesario para cubrir los vencimientos de capital e intereses contraídos por el Gobierno de María Eugenia Vidal, sin incrementar la carga de la deuda. En tanto que la Ley Impositiva garantizaba que ningún sector sufriera incrementos de la carga tributaria en términos reales».
Para la oposición, el panorama era distinto, y afirmaban que Kicillof «solo quería aumentar los impuestos y sumar endeudamiento que en el futuro pagarían los mismos bonaerenses».
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
El mandatario precisó que «nos habían presentaron principalmente dos pedidos: incrementar los fondos destinados a los municipios, que serían distribuidos según un indicador objetivo, y garantizar los cargos en organismos que corresponden a la oposición. Ambos pedidos fueron considerados por parte del Ejecutivo. Luego de varios avances, la oposición se negó a votar el capítulo de endeudamiento. Sin recursos aprobados, no tiene sentido validar un plan de gastos”.
Visiblemente molesto, señaló que, cuando la Legislatura pasó a cuarto intermedio, el Poder Ejecutivo “había estado a disposición y en diálogo permanente con todos los sectores de la oposición para acordar el articulado a aprobarse”.
En el tramo final de su posteo, apuntó directamente hacia el Ejecutivo Nacional: «A la gravísima situación a la que nos sometió el presidente Milei durante este año, se agrega ahora un golpe de la oposición al no aprobar el paquete presupuestario, herramienta básica de cualquier gobierno para planificar y ejecutar sus recursos y gastos.”
Por otra parte, Kicillof reveló que mantuvo una reunión con su vicegobernadora, Verónica Magario, miembros del gabinete y su equipo económico “para readecuar las partidas y reprogramar la planificación del año 2025”.
Por último, agradeció el apoyo recibido por intendentes, espacios afines y entidades gremiales: “Desde el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires continuaremos trabajando para proteger al pueblo del ajuste, la recesión y la pérdida de derechos. También reafirmó su compromiso de «proteger al pueblo del ajuste, la recesión y la pérdida de derechos».
En qué consistía el Presupuesto y la Ley Fiscal de Kicillof
El proyecto de Presupuesto General 2025 girado por el Ejecutivo proponía un cálculo de gastos por 34,3 billones de pesos. También la renovación de leyes de emergencias administrativas, económicas, en seguridad e infraestructura con las que el gobernador viene trabajando desde que asumió
Por otra parte, la ley Fiscal de la iniciativa planteaba topes del 28% aumento en el impuesto inmobiliario y del 20% en el impuesto Automotor. Sin embargo, se mantendrían las alícuotas de Ingresos Brutos e Impuesto a los Sellos.
Desde el PRO, la UCR y La Libertad Avanza manifestaron haber planteado temas como la Ley Fiscal Impositiva, la creación de bicamerales de control, la independencia del IOMA y los nombramientos en la Corte y el Banco Provincia, aunque destacaron la falta de respuestas del Ejecutivo. Mientras tanto, el bloque de UP comunicó este jueves que no realizarían más acciones respecto a las negociaciones, dejando esa responsabilidad al gobernador.
TC