La Armada taiwanesa organizó este jueves ejercicios militares frente a la costa sur de la isla, desplegando seis de sus buques más avanzados, entre ellos dos corbetas de clase Tuo Chiang, diseñadas específicamente para enfrentar las crecientes incursiones del régimen de China en la región.
El ejercicio, realizado en aguas cercanas a la ciudad portuaria de Kaohsiung, no incluyó fuego real. Las maniobras consistieron en una simulación en la que los buques taiwaneses debían responder a la aparición de “amenazas enemigas” en el mar, lo que implicó el despliegue de la brigada de misiles Haifeng y embarcaciones ligeras de clase Kuang Hua VI.
Tras la detección de hipotéticos barcos enemigos, los buques taiwaneses ensayaron una salida de emergencia desde el puerto, alcanzando una velocidad de 30 nudos (56 kilómetros por hora) para posicionarse tácticamente y simular el lanzamiento de misiles antibuque Hsiung Feng III, reconocidos por su capacidad supersónica y de medio alcance.
Las protagonistas del ejercicio fueron las corbetas de clase Tuo Chiang, rápidas, sigilosas y con capacidad para transportar misiles tanto antibuque como antiaéreos. Junto a ellas participaron los barcos ligeros Kuang Hua VI, capaces de cargar hasta cuatro proyectiles antibuque.
El teniente de navío Hsiao, presente en el ejercicio, afirmó que estas corbetas representan un ejemplo de guerra asimétrica: “Aunque sean embarcaciones pequeñas, pueden hacer frente a barcos mucho más grandes del Ejército Popular de Liberación (EPL)”, aseguró.
“Este ejercicio muestra nuestro compromiso con la mejora de nuestras capacidades defensivas. Ante las crecientes incursiones en la ‘zona gris’ del EPL, estamos siempre preparados para responder rápidamente”, agregó.
Las maniobras navales forman parte de los ejercicios anuales que las Fuerzas Armadas de Taiwán realizan antes del Año Nuevo lunar, que este año comenzará el 29 de enero.
Las tensiones entre China y Taiwán, gobernada de forma autónoma desde 1949 y considerada por Beijing como una “provincia rebelde”, se han intensificado desde la toma de posesión en mayo pasado del presidente soberanista William Lai.
Según datos del Ministerio de Defensa Nacional (MDN) de Taiwán, en 2024 se registraron 3.067 incursiones de aeronaves militares chinas en los alrededores del territorio isleño, un aumento del 80 % respecto al año anterior y un récord histórico desde que se comenzó a documentar esta actividad.
China ha intensificado sus incursiones en la denominada “zona gris”, un término usado para describir acciones militares que buscan desgastar las capacidades defensivas de Taiwán sin llegar a un conflicto abierto.
La Fuerza Aérea taiwanesa exhibió este miércoles ante los medios de comunicación sus sistemas de misiles Patriot junto con otros proyectiles antiaéreos, entre ellos el Sky Sword II, de producción propia, en medio del recrudecimiento de las tensiones entre Taipei y Beijing.
Durante un acto celebrado en la base aérea Ching Chuan Kang, ubicada a las afueras de la ciudad occidental de Taichung, la Fuerza Aérea mostró el funcionamiento de sus sistemas PAC-II y PAC-III (Patriot Advanced Capability), aunque sin llegar a lanzar ningún misil.
Los Patriot, que Taiwán compró a Estados Unidos por primera vez en 1993, son un sistema de misiles tierra-aire con capacidad de interceptar misiles balísticos, lo que los convierte en una pieza fundamental del sistema defensivo de la isla frente a un eventual ataque de China.
En unas declaraciones a la prensa local e internacional, el portavoz del Ministerio de Defensa Nacional (MDN) de Taiwán, el mayor general Sun Li-fang, detalló los “cuatro enfoques” que existen a la hora de adquirir armas del extranjero o producirlas a nivel nacional: fortalecer el “poder de combate asimétrico” y las capacidades de combate de los reservistas, mejorar la “resiliencia defensiva” de la isla y responder al “acoso en zona gris” de Beijing.
(Con información de EFE)