El trabajo ocupa gran parte de la vida adulta y sus efectos van más allá del ámbito profesional, influyendo en la salud mental, los hábitos y las relaciones personales. En la actualidad, cuando el estrés y la presión laboral son una constante, Dinamarca, reconocido por sus altos índices de felicidad, propone un enfoque diferente: el Hygge Work. La revista Esquire analizó el modelo basado en el bienestar y la comodidad para el entorno laboral, que busca transformar la rutina en una experiencia más placentera y equilibrada.
El término hygge es un pilar de la cultura danesa que representa el confort, la armonía y el disfrute de los pequeños momentos. Aplicado al trabajo, este principio permite que las jornadas sean menos agotadoras y más satisfactorias, sin importar si se desarrollan en una oficina tradicional o en otros espacios laborales.
Según Mike Wiking, director del Instituto de la Felicidad de Copenhague y autor del libro Hygge work: Cómo encontrar la felicidad en el trabajo y en la vida; esta filosofía es una herramienta efectiva para mejorar la experiencia laboral. “Es la fórmula para disfrutar más del trabajo, reducir el estrés y sentirse más feliz”, sostuvo el experto. En un país donde la satisfacción laboral es una prioridad, la técnica se presenta como una alternativa viable para transformar el enfoque del trabajo en otras partes del mundo.
El Hygge Work nace de un concepto arraigado a la idiosincrasia danesa: el hygge, una noción que abarca la búsqueda del bienestar a través de la sencillez, el confort y la armonía cotidiana. Esta idea definió el estilo de vida en Dinamarca y se trasladó a diversos ámbitos.
Dinamarca es uno de los países con los niveles más altos de felicidad en el mundo, lo que impulsó el interés en sus prácticas y modelos de vida. En el entorno laboral, esta filosofía no se basa únicamente en reducir el estrés, sino en fomentar un ambiente donde la confianza, la autonomía y el equilibrio con la vida personal sean fundamentales.
“Si los daneses, que siempre figuran entre las personas más felices del mundo, lo dicen, habrá que escucharles”, señaló el especialista Wiking, enfatizando la importancia de aplicar estos principios en otros entornos laborales.
Además, no se trata solo de una idea abstracta sobre el bienestar en el trabajo, sino un conjunto de prácticas concretas diseñadas para mejorar la experiencia profesional. Desde la construcción de relaciones basadas en la confianza hasta la importancia de los descansos cortos, esta filosofía danesa se estructura en cinco pilares fundamentales que buscan generar un ambiente más motivador.
Uno de los principios esenciales del Hygge Work es la confianza, entendida tanto en las relaciones laborales como en la seguridad personal de cada trabajador. En el país nórdico, este valor es un pilar en la cultura empresarial, donde los líderes confían en sus empleados y viceversa, creando un espacio para que las ideas pueden expresarse sin temor.
La confianza también se vincula con la seguridad individual. Sentirse respaldado para plantear inquietudes o defender necesidades dentro del entorno de trabajo fortalece la autoestima y la productividad. Un equipo donde todos se sienten escuchados y respetados genera un ambiente colaborativo y motivador.
La flexibilidad es otro elemento clave. La posibilidad de organizar el tiempo y definir cómo abordar las tareas diarias mejora la satisfacción y el rendimiento. Este método permite equilibrar mejor las responsabilidades personales y profesionales, evitando el estrés que genera la rigidez de ciertos esquemas laborales.
No se trata de eliminar la estructura de trabajo, sino de otorgar cierto margen de libertad dentro de los límites establecidos. Comunicar expectativas con claridad y fomentar acuerdos entre empleados y empleadores permite que la autonomía se convierta en una herramienta efectiva para mejorar el bienestar en el trabajo.
El entorno físico influye directamente en el estado de ánimo y la motivación. Un espacio laboral agradable y bien organizado puede marcar la diferencia en la percepción del trabajo. Desde elementos sencillos como una iluminación adecuada o una silla ergonómica hasta detalles más personales como plantas o aromas relajantes, cada aspecto contribuye a crear un ambiente en el que las personas se sientan cómodas.
A diferencia de la creencia de que la eficiencia está ligada a largas jornadas sin interrupciones, el Hygge Work enfatiza la importancia de las pausas breves. Tomar descansos durante el día reduce el agotamiento mental, y también mejora la concentración y el desempeño. Acciones simples como tomar un café, conversar con un compañero o salir a caminar unos minutos pueden ser suficientes para recargar energía y retomar las tareas con mayor claridad.
Para que el trabajo no se convierta en una carga, es fundamental que no invada la vida personal. En Dinamarca, el respeto por los horarios fuera de la oficina es una norma establecida. Desconectar de las responsabilidades laborales permite que las personas se dediquen a actividades que les generan bienestar, como pasar tiempo con la familia, practicar un hobby o simplemente descansar.