Hay muchas maneras de preparar este corte de carne de cerdo, pero asado y con un acompañamiento de patatas es una de las más ricas y populares
En el universo de los asados, el de solomillo de cerdo es uno de los más fáciles y ricos con el que podemos encontrarnos. Sobre todo si lo acompañamos de unas deliciosas patatas asadas, se convierte en un plato completo y riquísimo, que podemos preparar en casa sin demasiadas complicaciones y con un resultado de sobresaliente asegurado.
El solomillo de cerdo es una de las piezas más valoradas del animal debido a su bajo contenido de grasa y su versatilidad en la cocina. Este corte, que se distingue por su ternura y jugosidad, se ha convertido en un elemento esencial en la dieta de muchos hogares, donde se consume con frecuencia gracias a su facilidad de preparación y su capacidad para adaptarse a diversas recetas. La preparación al horno, en particular, resalta como una de las formas más sencillas y efectivas de cocinarlo, permitiendo que los sabores se concentren y se potencien al máximo.
Esta receta no solo es adecuada para el día a día, sino que también se presenta como una opción ideal para ocasiones especiales y comidas con invitados. Su preparación no requiere técnicas complejas ni ingredientes difíciles de conseguir, lo que la convierte en una alternativa perfecta para quienes desean impresionar en la mesa sin invertir demasiado tiempo o esfuerzo.
El solomillo de cerdo es una carne tierna y jugosa que, al hornearse junto con patatas, ofrece un plato completo, sabroso y perfecto para compartir en familia. La clave del éxito está en el punto de cocción del solomillo y en unas patatas bien condimentadas que absorban todos los jugos de la carne.
- Tiempo total: 1 hora y 15 minutos
- Preparación: 15 minutos
- Horneado: 1 hora
- 1 solomillo de cerdo (aprox. 800 g)
- 4 patatas medianas
- 1 cebolla grande
- 3 dientes de ajo
- 1 vaso de vino blanco
- ½ vaso de caldo de carne
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra al gusto
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1 ramita de romero fresco (opcional)
- 1 cucharada de mantequilla (opcional)
- Precalentar el horno a 200 °C.
- Preparar las patatas y la cebolla: Pelar las patatas y cortarlas en rodajas de aproximadamente 1 cm de grosor. Cortar la cebolla en juliana y pelar los ajos.
- Montar la base: En una bandeja de horno, colocar las patatas, la cebolla y los ajos enteros. Salpimentar y añadir un buen chorro de aceite de oliva. Espolvorear con el pimentón y mezclar bien.
- Añadir el líquido: Verter el vino blanco y el caldo de carne sobre las patatas. Colocar la bandeja en el horno y hornear durante 30 minutos.
- Preparar el solomillo: Mientras las patatas se hornean, salpimentar el solomillo y dorarlo en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que esté sellado por todos lados.
- Hornear el solomillo: Sacar la bandeja del horno y colocar el solomillo sobre las patatas. Añadir la mantequilla en trocitos sobre la carne y, si se desea, una ramita de romero para dar aroma.
- Finalizar la cocción: Hornear todo junto durante 20-25 minutos más, dependiendo del punto de cocción deseado. Si se quiere un interior jugoso, retirar el solomillo cuando la temperatura interna alcance los 63 °C.
- Reposo y servir: Dejar reposar la carne unos 5 minutos antes de cortarla en medallones y servir con las patatas y su jugo.
Con estas cantidades, esta receta rinde 4 porciones generosas.
Cada porción de solomillo de cerdo al horno con patatas contiene aproximadamente:
- Calorías: 450 kcal
- Grasas: 18 g
- Grasas saturadas: 6 g
- Carbohidratos: 40 g
- Azúcares: 6 g
- Proteínas: 35 g
Cabe señalar que estas son estimaciones y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
Este plato se puede conservar en la nevera por hasta 3 días en un recipiente hermético. Para recalentar, es recomendable usar el horno o una sartén a fuego bajo para mantener la textura de la carne.