Diferentes instituciones, junto a la Policía, llevan adelante un amplio trabajo en las poblaciones en riesgo de inundaciones
La Policía y diferentes organismos del Gobierno de Formosa pusieron en marcha un sistema integral de protección que incluye monitoreo, asistencia, concientización y sugerencia de relocalización de algunas poblaciones del oeste provincial ante la crecida del Río Pilcomayo.
Efectivos de la Unidad Regional Nueve Palmar Largo, junto a otros organismos del Estado, brindan asistencia a familias de las colonias Santa Teresa Viejo y Puesto Salas en la jurisdicción de la localidad de María Cristina.
El Gobierno provincial desplegó un equipo de trabajo interinstitucional que incluye, además de la Policía, áreas del Ministerio de Desarrollo Humano, Ministerio de la Comunidad y la colaboración de intendencias de la zona de emergencia.
También tienen una participación activa los integrantes del Destacamento de Bomberos ubicado en la zona, quienes han aportado su experiencia y recursos en esta tarea integral de ayuda.
Este trabajo en conjunto busca garantizar la seguridad y el bienestar de las personas que residen en las zonas más vulnerables ante el avance del agua, por crecidas extraordinarias en la alta cuenta del Río Pilcomayo, a la altura de Bolivia.
Ante el importante caudal de agua que avanza hacia territorio formoseño, las autoridades instan a los pobladores a colaborar con las recomendaciones y procedimientos establecidos para evitar situaciones de riesgo.
La prevención es fundamental y la cooperación de la comunidad es crucial para minimizar las posibilidades de incidentes que podrían llevar a lamentar víctimas.
De acuerdo a los antecedentes históricos del comportamiento del Pilcomayo y los registros de los últimos días, se activó un amplio sistema de protección de un Estado provincial presente y comprometido en brindar toda la ayuda necesaria a quienes se encuentren en riesgo.
En este sentido, se remarca la importancia de actuar con prudencia y preparación ante cualquier eventualidad relacionada con la creciente del río.
Se solicita a todos los habitantes de la región, que permanezcan atentos a las indicaciones de las autoridades y que se pongan en contacto con los organismos de asistencia en caso de necesitar ayuda.
El trabajo en la zona es arduo y se monitorea el comportamiento del Pilcomayo, lo que permitirá tomar decisiones basadas en informaciones certeras y oportunas para proteger a la comunidad formoseña.