Una grave denuncia por mala praxis y falta de atención adecuada en una clínica privada de la ciudad sacudió las redes sociales y medios locales en las últimas horas. Karen Miño, vecina de Formosa, dialogó con el Grupo de Medios TVO y relató el difícil momento que atravesó junto a su hija menor de edad, quien sufrió una fractura en el brazo.
Según el testimonio de Miño, todo comenzó el domingo por la noche, cuando acudió de urgencia a la clínica con su hija:
“Llegué con mi hija a la guardia, tenía el brazo fracturado. Nos atendió un pediatra que solo la medicó con ibuprofeno porque no tenían para hacer radiografías”, denunció. La madre relató que al no contar con diagnóstico por imágenes en ese momento, regresó al día siguiente a las 15:30 para ser atendida por un traumatólogo.
Recién una hora después, a las 16:30, fue atendida por el especialista, quien le confirmó la fractura y le indicó que el brazo debía ser enyesado. Sin embargo, la sorpresa vino con la propuesta del médico:
“Me dijo que por mi obra social era mucho problema y que lo mejor era que yo pague 30 mil pesos más 16 mil de insumos. Yo le respondí que no, porque tengo la obra social activa, y pedí que me hiciera el pedido para autorizarlo. Volví con todo actualizado a las 17:30”, explicó.
A pesar de haber cumplido con el trámite correspondiente, Miño asegura que el médico nunca regresó para atender a su hija.
“Esperamos hasta las 19 horas que el especialista se acerque a enyesarle el brazo, pero nunca nos atendió. Me dijo que no nos iba a atender porque él me dio la opción de que sea más fácil por la vía privada, pagando en efectivo”.
Exigen respuestas y controles
El caso ha generado indignación en la comunidad y encendió nuevamente el debate sobre el acceso efectivo a la atención médica con cobertura social en instituciones privadas. Situaciones como la relatada por Karen Miño evidencian los obstáculos que deben atravesar muchos pacientes para recibir atención sin abonar montos desproporcionados por fuera de sus obras sociales.
Diversos sectores de la sociedad ya han solicitado la intervención del Ministerio de Salud y de los organismos de control para investigar este tipo de prácticas que vulneran los derechos de los pacientes.
En un contexto donde los profesionales de la salud vienen reclamando mejoras laborales y pagos en tiempo y forma por parte de las obras sociales, este tipo de hechos ponen en el centro del debate la necesidad de garantizar una atención médica ética, equitativa y ajustada a la normativa vigente.