En un importante procedimiento llevado a cabo por Gendarmería Nacional, se logró incautar alrededor de 500 ampollas de fentanilo durante un control de rutina sobre la Ruta Nacional 11, operativo que derivó en una investigación federal de gran alcance y que culminó con allanamientos y detenciones en la provincia de Mendoza.
El fiscal federal Luis Benítez, quien interviene en la causa, brindó detalles del operativo en diálogo con el Grupo de Medios TVO, destacando el trabajo articulado entre las fuerzas de seguridad y la justicia.
“Fue un trabajo llevado adelante por Gendarmería Nacional, a partir de la detección de una encomienda con fentanilo que tenía como destino la provincia de Mendoza. A partir de allí, y con la aplicación de técnicas de investigación, se logró identificar el destino final y se procedió a interceptar a las personas que retiraron las encomiendas”, explicó Benítez.
El operativo permitió detectar dos encomiendas, una con fentanilo y otra con cocaína, y la detención de dos personas, una de ellas de nacionalidad chilena. Durante el allanamiento a la vivienda de uno de los implicados, las autoridades hallaron una tercera caja que también contenía fentanilo, lo que refuerza la hipótesis de un circuito organizado de tráfico de sustancias controladas.
El fentanilo, un opioide sintético de altísima potencia, es considerado una droga de alto riesgo por su potencial letal y por su creciente presencia en redes de narcotráfico a nivel internacional. La magnitud de esta incautación en Argentina pone en alerta a las autoridades sobre nuevas modalidades de transporte y distribución de este tipo de estupefacientes.
La investigación continúa bajo la órbita del Juzgado Federal correspondiente, mientras se analizan posibles ramificaciones del caso. Desde el Ministerio Público Fiscal subrayaron que el seguimiento del caso apunta a desmantelar redes criminales que operan con este tipo de sustancias, cuya circulación representa un serio riesgo para la salud pública.