Las intensas lluvias que afectaron a la ciudad de Formosa durante los últimos días generaron complicaciones en varios puntos de la ciudad, especialmente en los barrios Fray Salvador Gurrieri y 28 de Junio, donde las calles de tierra y ripio se volvieron prácticamente intransitables.
La acumulación de agua, el barro y los pozos hicieron que muchos vecinos tengan dificultades para salir de sus casas, tanto a pie como en vehículos. «No puedo pedir un helicóptero que me pase a buscar», expresó una vecina entre risas e ironía, intentando ponerle algo de humor a una situación que ya se vuelve habitual cada vez que el clima no acompaña.
“Si es intransitable y llueve, salen a romper las calles y después se quejan. Y los que opinan, resentidos, ¿qué hacen para mejorar?”, comentó otro vecino en redes sociales, marcando cómo el mal tiempo termina desatando discusiones entre los mismos habitantes del barrio.
Aunque no es la primera vez que el clima genera este tipo de inconvenientes, las lluvias de esta semana fueron especialmente persistentes y afectaron durante varios días seguidos, sin darle tiempo al suelo de drenar y recuperarse. Esto volvió intransitable gran parte de las calles internas, lo que genera preocupación entre los vecinos, sobre todo por cuestiones de movilidad, salud y asistencia escolar.
Mientras esperan que el clima dé una tregua, los residentes de Gurrieri y 28 de Junio se organizan como pueden, ayudándose entre ellos y buscando soluciones momentáneas para afrontar los días de mayor anegamiento.