La Cámara de Senadores postergó el pronunciamiento contra la resolución de la jueza Loretta Preska, que el 30 de junio resolvió que la Argentina debe entregar el 51% de las acciones de YPF, como parte del cumplimiento de la sentencia por la expropiación de la petrolera en 2012.
El tema se iba a desarrollar como una sesión secreta (en la que solo pueden estar presentes los miembros del cuerpo y un taquígrafo) en el final de la extensa jornada en la que el Gobierno sufrió un duro revés por la aprobación de los proyectos de jubilaciones, moratoria previsional, discapacidad y fondos a provincias.
Pero después de un cuarto intermedio solicitado por el senador José Mayans para acordar el texto, intervino el jefe del bloque radical, Eduardo Vischi, quien argumentó: «Teniendo en cuenta que hay varios proyectos respecto a una sesión secreta que habíamos pedido específicamente para abordar un tema muy delicado, un tema que amerita una intervención quirúrgica de este Senado, es que vamos a pedir un tiempo para tratarlo y ponernos de acuerdo, para hacerlo de forma concreta y como corresponde”.
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Aclaró que sobre el tema hay un consenso general. “Pero queremos tener un documento que sea muy específico y contundente», remarcó. Y pidió levantar la sesión.
El senador Oscar Parrill, de UxP se sumó al pedido, “Priorizamos el interés de todos los argentinos, porque YPF no es una pequeña empresa y para nosotros es un elemento que nos debe unir a todos los argentinos, independientemente dela postura que tengamos”, sostuvo.
En desarrollo…
LT