El director de la Comisión de Fronteras e Ilegalidad de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Fabián Hryniewicz, repudió el cierre de la Dirección Nacional de Vialidad (DNV) que fue dispuesto por decreto del presidente Javier Milei.
Si bien hace unos días el Juzgado Federal en lo Civil, Comercial y Contencioso Administrativo N° 2 de San Martín resolvió hacer lugar a la medida cautelar solicitada por el Sindicato de Empleados de Vialidad Nacional – Casa Central (SEVINA) y frenar la disolución del organismo, el Gobierno nacional confirmó que apelará la decisión judicial.
Al respecto, Hryniewicz condenó que “que se den de baja los organismos”, ya que ello significa que “un gran porcentaje o toda esa gente que estaba empleada en esas oficinas, en algún momento, se quedará sin trabajo”, ocasionando “una merma sustancial en el circulante para consumir”.
En declaraciones que fueron recogidas por AGENFOR, además remarcó que “hay entidades, instituciones que son estratégicas y que no hay que pensarlas en el hoy, sino en el futuro”.
Aludiendo al caso de Vialidad Nacional, sin medias tintas, consideró que decretar su cierre “es mandarle un misil hipersónico al corazón mismo del desarrollo productivo y económico de la Nación”.
En ese sentido, planteó “por qué pagamos impuestos sobre la tasa de combustibles que están destinados al mantenimiento, repavimentación y extensión de rutas nacionales”, puesto que “lo único que hemos visto es que han proliferado los grandes baches” en las rutas nacionales.
Cabe recordar que desde la llegada de la gestión libertaria a la Presidencia, puso en marcha la “motosierra” y comenzó a desfinanciar el mencionado organismo, generando un peligroso estado de abandono de la red vial, el crecimiento de los siniestros y “el desaliento de los comerciantes y productores”, a los que se les dificulta el traslado de sus productos.
“Si yo fuera un productor de carbón de Palo Santo y tengo que mandar una carga a Buenos Aires, muy probablemente, la rentabilidad que me deje ese viaje la pierda con la rotura de una cubierta de mi transporte o de algún repuesto”, ejemplificó Hryniewicz.
Entonces, “desalienta tener que hacer ese tipo de emprendimiento”, o bien para evitar ello, “se buscará una colocación cercana, local, que obviamente va a achicar muchísimo la ganancia que se pueda lograr”, teniendo en cuenta que “si las rutas están deterioradas, colapsa la producción y muere”.
Asimismo, trazó un paralelismo con lo ocurre en países vecinos, que van a contramano de las decisiones del Gobierno de Milei. “Vemos que hacen alianzas estratégicas y que ya están próximos a inaugurar el corredor bioceánico de Brasil con Chile, todo pavimentado y con un sistema de tránsito de última generación”, contrastó.
Además, mientras “nuestras rutas soportan hasta 45 toneladas de carga, las que están haciendo para el corredor bioceánico están pensadas para los camiones que están en otros países del mundo y que seguramente van a venir a América Latina, con lo cual soportan hasta 60, 70 toneladas”, de modo que “realmente nos preocupa” lo que pasa en Argentina.