La Convención Constituyente de Formosa se ha convertido en el epicentro de un fuerte debate político, tras las duras acusaciones de la diputada convencional Gabriela Neme (Nuevo País), quien denuncia una «violación del reglamento», censura y persecución a los opositores por parte del oficialismo.
En un comunicado y un discurso difundido en video, la legisladora sostuvo que lo que sucede en la provincia es una clara muestra de que «no rige el régimen republicano de gobierno».
Según Neme, el oficialismo busca crear una figura «insólita» que acusa de «traidores al pueblo» a quienes soliciten la intervención federal de la provincia, una medida contemplada en la Constitución Nacional.
«Defender la República no es traicionar a la provincia de Formosa, es defender a los habitantes del pueblo de Formosa», afirmó la diputada, y agregó que «Formosa es Argentina y nosotros nos vamos a encargar de recuperarla».
La diputada Neme responsabiliza al oficialismo por lo que considera una concentración de poder, el «avasallamiento de la Justicia» y la falta de libertades.
Para la legisladora, quienes «llevan décadas destruyendo la división de poderes y gobernando como si Formosa fuera un feudo» son los verdaderos traidores.
En su intervención, Neme cuestionó directamente la constitucionalidad de las propuestas del oficialismo, advirtiendo que las medidas que pretenden aprobar «caen con una acción de inconstitucionalidad».
Además, denunció que se le negó la palabra en más de 20 ocasiones durante el debate, una práctica que considera una violación sistemática de sus derechos como convencional.
La legisladora concluyó con un contundente llamado a la intervención federal, argumentando que es una medida «urgente» cuando la ley se pisotea, los opositores son hostigados y se intenta «acallar la verdad».