En el Polo Científico, Tecnológico y de Innovación, el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, suscribió con su par de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, un convenio marco de colaboración para llevar adelante programas y acciones entre ambas jurisdicciones. Ante el abandono del Gobierno libertario, “entre las provincias argentinas, que son solidarias y hermanas, tenemos que darnos una mano”, subrayó el mandatario bonaerense, quien destacó “la transformación” provincial.
Acompañaron a los gobernadores Insfrán y Kicillof el vicegobernador formoseño Eber Solís; el presidente provisional de la Cámara de Diputados, Armando Cabrera; los ministros de Seguridad de la PBA, Javier Alonso, y de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque; el intendente capitalino Jorge Jofré; ministros del gabinete provincial, secretarios del Poder Ejecutivo, legisladores provinciales, autoridades policiales, entre otros.
En el inicio de la ceremonia se efectuó la lectura y la posterior entrega del decreto que declaró Huésped de Honor al mandatario bonaerense y a su comitiva, tras lo cual se proyectó un video institucional.
Seguidamente, hizo uso de la palabra el secretario de Ciencia y Tecnología de la provincia, el doctor Camilo Orrabalis, quien definió al Polo Científico como “una pieza estratégica del Modelo Formoseño, un espacio de casi 1000 hectáreas donde coexisten instituciones públicas, empresas privadas y estatales, y de relevancia fundamental, jóvenes talentos transitando y construyendo no solo un presente sólido, sino también un futuro prometedor y sostenible”.
“Este espacio es una de las tantas instituciones que el Modelo Formoseño, bajo la conducción del doctor Insfrán, se brinda a la comunidad demostrando la grandeza de un Estado presente, eficiente y de estricta justicia social”, apuntó el funcionario.
Y prosiguió destacando que en Formosa “la ciencia y la tecnología tiene un contundente respaldo político”, diferenciándose “abismalmente” del actual Estado nacional y de sus políticas cientificistas.
Esto es así porque “en el Modelo Formoseño se tiene bien claro que la ciencia y la tecnología son responsabilidad indelegable del Estado y no una mercancía como lo considera la gestión nacional actual”, además de que “nuestros científicos, tecnólogos y técnicos tienen un fuerte compromiso con el desarrollo local y regional, trabajan vinculados con distintos sectores y organismos provinciales para comprender nuestras problemáticas y proponer soluciones”, robusteció.
En ese sentido, hizo notar que “contamos con capital humano, capacidades y equipamiento, pero aún con algo más valioso que es la decisión política de que este espacio exista y esté al alcance y al servicio del pueblo”, destacando que el Polo “es el reflejo de una gestión política que trabaja por la soberanía científica, la inclusión social y el futuro de cada uno de los formoseños”.
En el tramo final de su discurso, Orrabalis lamentó “los embates de la motosierra libertaria” en el sector científico tecnológico argentino; no obstante, dejó en claro que “no vamos a bajar los brazos” y reafirmó que “seguiremos trabajando con la firme convicción de que cuando recuperemos la Patria y nuestro país vuelva a tener un Presidente con conciencia y compromiso federal, los proyectos hoy eliminados por la gestión libertaria podrán concluirse para continuar acrecentando la grandeza y la felicidad de nuestro pueblo”.
“Hoy en la Argentina no hay un proyecto nacional que promueva la soberanía científico-tecnológica –reprobó-. Lo que hay es un proyecto sistemático de desarticulación del sistema científico, una renuncia explícita al desarrollo soberano y una transferencia brutal de capacidades hacia el extranjero”.
Frente a esto, “desde espacio decimos ‘no’ al desfinanciamiento de la ciencia y la tecnología, de la educación y al cientificidio. Decimos ‘sí’ al desarrollo nacional, a la ciencia, la tecnología y la educación”, finalizó.
Convenio
Acto seguido, se procedió a la firma del convenio marco de colaboración, cooperación y asistencia recíproca entre ambas provincias, el cual fue suscripto por los gobernadores Insfrán y Kicillof.
Dicho acuerdo tiene por objeto establecer un amplio marco de colaboración, cooperación y asistencia recíproca entre las partes en las materias de Gobierno, seguridad, salud, educación, formación y capacitación, ciencia y tecnología, así como en modernización, producción, economía circular y energías renovables, entre otras, con la finalidad de articular programas y acciones entre sí que, en forma conjunta, consideren convenientes este esfuerzo mutuo.
Provincia pujante
Por su parte, el gobernador Kicillof, al brindar unas palabras, comenzó recordando que “yo viví en esta Capital durante el año 1998, así que muchos de los funcionarios y quienes me han recibido hoy son también viejos amigos con los que nos hemos reencontrado”, acentuando que se trata de “una visita importante en materia de gestión porque vinimos a firmar un convenio en el cual se viene trabajando desde el Ministerio de Seguridad en el convenio específico, pero también en un convenio marco”.
Para el mandatario bonaerense, se trata de “una visita con hondo e importante contenido político” y desde lo personal sostuvo que contiene “un contenido afectivo”, por lo expresado anteriormente. “Me he podido cruzar con antiguos compañeros y amigos, conocidos de aquella época –contó-. Así que me invade una emoción, un recuerdo, pero también vengo a dar testimonio de una enorme transformación que experimentó la provincia de Formosa”, resaltando que “desde que pusimos un pie en la Capital, en territorio formoseño, me encontré con muchísimas cosas en materia de desarrollo, en tecnología, en bienestar; he podido ver por fuera y por dentro algunos de estos avances, así que es muy impactante”, describió. “Son todas cuestiones que transformaron de raíz a Formosa”, acotó.
“Formosa es otra, se ha transformado, hoy tiene el orgullo de participar del desarrollo de punta, desde una mirada desde la vivienda, desde lo educativo, la salud y lo que tiene que ver con la ciencia y la tecnología. Pero, sobre todo, hay justicia social”, enfatizó.
En esa línea, certificó que “puedo decir en primera persona que soy testigo presencial de que aquel plan de Gobierno (cuando asumió el gobernador Insfrán) se ha cumplido y se ha superado”. “Veo una Formosa moderna, pujante, que ha cumplido sus sueños en buena medida, que los ha renovado y esa transformación, esas mejoras, tienen un nombre y un apellido que es Gildo Insfrán. Y nadie me lo contó, lo vi y lo experimenté”, ponderó.
Felicitó aquí al mandatario formoseño, a sus colaboradores y a “quienes te han puesto tantas veces en la silla que ocupás, al pueblo de Formosa”.
“Gildo, para quienes estamos haciendo nuestros pasos, ya no los primeros, en la gestión pública, no solo que es una figura central, sino un ejemplo y un maestro”, elogió.
Asimismo, al referirse al plano nacional, advirtió que “estamos sufriendo el abandono, la ausencia y la deserción del Gobierno del presidente Javier Milei”.
“Tenemos un Gobierno nacional que abandona determinadas áreas, inversiones, la obra pública, funciones, responsabilidades, pero yo lo llamo deserción porque son obligaciones las que abandonó Milei. Están escritas y constan en leyes y presupuestos”, repudió, ejemplificando que “cuando nos dejan una obra sin terminar, como las tantas que tenemos plagadas en toda la República Argentina, también en Formosa, así como en la PBA, donde hay 1000 obras que abandonó el Gobierno nacional”, denunció.
Y avanzó al dilucidar que “es mucho más que eso, porque terminar esas obras no es una cuestión de voluntad, vocación, inclinación o ideología; son compromisos, leyes que se están incumpliendo”, y continuó: “Me animo a decir que el principal problema que tenemos hoy es que el Gobierno nacional está incumpliendo cualquier ley o marco normativo, sino la Constitución Nacional, que en su artículo 1° dice que tenemos un régimen federal y la gestión bajo la conducción de Milei es probablemente una de las experiencias más centralistas y unitarias que le tocó vivir a la República Argentina”.
En ese contexto, “quienes gobernamos las provincias nos vemos obligados a extender nuestras funciones y posibilidades más allá muchas veces de los recursos menguantes con los que contamos”, a causa de que “el Gobierno nacional, obstinadamente, abandona a los pueblos de la Argentina, a las provincias y eso no es una denuncia política solamente; es ilegal e inconstitucional”, patentizó.
Afirmó que “no es optativo” que la gestión nacional “se ocupe de la educación pública, de la salud y que haga obra pública”, por cuanto “no depende de las ideas de quien preside la Nación, es mucho más que eso, es una forma de Gobierno, de organización” del país.
En ese marco, sostuvo que “hoy las funciones que le corresponde al Gobierno nacional no las desempeña y no las cumple”, por lo que los mandatarios provinciales “tenemos que encargarnos de complementar, sustituir y muchas veces de responder cuestiones que no nos corresponden”.
Por caso, remarcó que en la PBA “el Gobierno provincial es un escudo y una red ante la ausencia de políticas públicas abandonadas por el Gobierno de Milei, pero no alcanza. Hay dimensiones y magnitudes que escapan a las posibilidades de una provincia” y mencionó, a modo de ejemplo, cuando la gestión libertaria “dejó de distribuir los medicamentos oncológicos, material pedagógico o incluso alimentos y asistencia”.
Ante este panorama, el gobernador Kicillof puso en relevancia el convenio firmado con Formosa, porque “como el Gobierno nacional no está, se borró, entre las provincias argentinas, que son solidarias y hermanas, tenemos que darnos una mano”.
Para finalizar, instó a “no caer en falsas antinomias” como propone la gestión libertaria, ya que “en ningún lugar del planeta deciden por blanco o por negro, si todo es Estado o si todo es mercado”.
“En especial en las sociedades más avanzadas, y particularmente en el plano de la innovación, la ciencia, la tecnología, la productividad, la competitividad, nadie, nunca, decidió una cosa o la otra como si fueran polos antagónicos. Y hasta que no lo entiendan, la Argentina va a estar condenada”, advirtió y reafirmó que “lo que hay que hacer es buscar una integración virtuosa, sinérgica, una colaboración eficiente, honesta y de calidad entre lo privado y lo estatal. Y en Argentina, ese modelo que genera desarrollo con inclusión se llama Peronismo”, concluyó.
