Lo que comenzó como un reclamo de justicia terminó en una jornada de violencia y caos en el sector sur de la ciudad. El barrio 28 de Junio (ex Lote 110) se convirtió en el escenario de graves disturbios luego de que la comunidad descubriera que un hombre acusado de abusar de una menor de 9 años había recuperado su libertad.
El origen del conflicto y la indignación vecinal
El caso que estalló esta semana tiene sus raíces el pasado 21 de octubre, fecha en la que se denunció el presunto abuso contra una niña de apenas 9 años. El señalado como responsable es un hombre identificado por los vecinos como un supuesto pastor de la zona. Tras la denuncia inicial, el sujeto permaneció detenido durante aproximadamente dos meses; sin embargo, su reciente excarcelación encendió la mecha del conflicto.
La noticia de su liberación corrió rápidamente entre los pasillos del barrio, generando un clima de indignación y enojo en el entorno cercano de la víctima y en la comunidad barrial, quienes consideran que el proceso judicial no ha avanzado con la firmeza necesaria.
Incidentes, destrozos y un fuerte operativo de seguridad
Ante la confirmación de que el sospechoso caminaba nuevamente por las calles, se produjo una concentración espontánea de vecinos y familiares frente a la vivienda del acusado. Lo que inició como una protesta ruidosa escaló rápidamente cuando grupos de personas, movidos por la impotencia, intentaron ingresar por la fuerza al domicilio.
La Policía de la Provincia desplegó un importante operativo policial con el objetivo de evitar hechos de violencia, formando cordones de seguridad para proteger la propiedad. A pesar de los esfuerzos de los uniformados, la situación se desbordó y se registraron importantes destrozos en la propiedad. Cabe destacar que el acusado no se encontraba en el lugar al momento de los ataques.
Como saldo de los enfrentamientos entre civiles y fuerzas de seguridad, resultaron heridos tanto efectivos policiales como algunos vecinos, y se registraron varias personas detenidas por los disturbios.
Revocación de la libertad y nueva detención
Horas después de los incidentes, la Justicia tomó una medida drástica para calmar los ánimos y garantizar la continuidad del proceso. Se confirmó que el acusado fue nuevamente aprehendido luego de que la Justicia resolviera revocar su excarcelación.
Según fuentes judiciales, la decisión no se basó estrictamente en los disturbios, sino en un comportamiento procesal indebido por parte del implicado. La medida se tomó porque el hombre habría incumplido las condiciones impuestas, entre ellas la obligación de informar cada vez que se ausentaba de su domicilio, lo que fue considerado un posible riesgo de fuga.
El desgarrador testimonio de la madre
Belén Ocampo, madre de la niña, expresó públicamente su angustia por la situación y el calvario que vive su familia desde octubre. La mujer remarcó que las secuelas del hecho denunciado siguen vigentes y que su hija requiere atención constante. “Es muy injusto todo, estoy desesperada y no sé qué hacer”, manifestó entre lágrimas ante los medios presentes.
Ocampo relató la confusión administrativa que rodea el caso, señalando que fue notificada de la liberación del sujeto hace pocos días bajo el argumento de una supuesta falta de pruebas, algo que ella desmiente categóricamente debido a las pericias realizadas desde el primer día. Además, denunció una falta de coordinación en el sistema judicial: tras el aberrante hecho, Ocampo aseguró haber sido contactada por personal del Poder Judicial para interiorizarse sobre el estado de salud de su hija y sostuvo que, de acuerdo a lo que le manifestaron, no figuraba en el sistema que el acusado se encontrara en libertad.
Situación actual
Al cierre de esta edición, el barrio mantiene una calma tensa. La causa, que aún se encuentra bajo investigación judicial, sin una sentencia firme, continúa su curso mientras la niña continúa bajo atención médica y acompañamiento psicológico como consecuencia de lo ocurrido. La comunidad permanece alerta, exigiendo que la justicia actúe con celeridad para evitar que se repitan actos de justicia por mano propia.
