Lionel Messi apareció este viernes entre los jugadores convocados por Gerardo Martino para el partido que Inter Miami jugará el sábado como local frente a Colorado Rapids por la séptima fecha de la Major League Soccer.
Messi dejó atrás la molestia física que lo tuvo a maltraer en las últimas semanas y que le impidió participar de la gira con la Selección Argentina por Estados Unidos y disputar los últimos cuatro compromisos de su equipo.
De esta manera, se espera que el crack argentino sume minutos en el Chase Stadium, aunque sea ingresando desde el banco de suplentes, para llegar con ritmo de juego al partido del miércoles frente a Rayados de Monterrey por la vuelta de los cuartos de final de la Concachampions, el gran objetivo del equipo rosa en la temporada. Perdieron la ida 2-1, con Messi en la tribuna, y necesitarán a su principal estrella para revertir el resultado.
Aquel fue el cuarto partido consecutivo que se perdió el rosarino. Su última aparición fue el 13 de marzo por los octavos de final del certamen continental, cuando fue remplazado a los 5 minutos del segundo tiempo de la revancha contra Nashville SC. Había metido un gol y mostrado un muy buen nivel, pero con el marcador 2-0 le dejó su lugar al finlandés Robert Taylor apenas iniciado el complemento. Al final fue 3-1 y clasificación a la siguiente instancia.
Tampoco jugó en la victoria por 3-1 sobre DC United, en la derrota por 4-0 contra New York Red Bull ni en la igualdad 1-1 frente New York City, todos por el torneo local, además de perderse los amistosos de la Scaloneta ante El Salvador en Filadelfia y Costa Rica en Los Ángeles. Ahora volverá a saltar a la cancha.
Messi observó desde un palco la derrota de Inter Miami ante Monterrey. Foto: Megan Briggs/Getty Images/AFP «Todo lo que rodea a Messi puede llevar a tomar decisiones deportivas y extradeportivas. El negocio no va por el lado de Monterrey y lo sabemos todos. Todos sabemos que el fútbol es negocio. Deportivamente le voy a ganar, después hay cosas que no puedo manejar», había dicho Ortíz en la previa del encuentro.
Y a Leo no le gustó nada. Aseguran que en el post partido tuvieron un cruce. «Tata Martino, Lionel Messi, Jordi Alba y posteriormente Luis Suárez le fueron a reclamar al arbitro guatemalteco Walter López. Pero eso no fue lo peor. De ahí se fueron al vestuario del Monterrey para buscar al Tano Ortiz. Messi también se encaró con Nico Sánchez (ayudante de campo)», informaron desde México durante la jornada del jueves.
Después, el DT intentó calmar las aguas: «Esperábamos que pudiera jugar. Lo he dicho y lo vuelvo a manifestar, considero que es el mejor jugador del mundo de todas las épocas. Ojalá pueda estar en la vuelta y poder disfrutarlo». Continuará.