El juez de Instrucción y Correccional Nº 6 de Formosa, Guillermo Omar Caballero, resolvió procesar con prisión preventiva a las tres mujeres que están acusadas de haber matado a golpes a un vecino del barrio Simón Bolivar, identificado como Amado Cáceres, en la madrugada del 18 de marzo de este año.
El juez que tiene a su cargo el caso llegó a esta conclusión luego de analizar las pruebas que pudo reunir durante estos tres meses de investigación, las cuales señalan a las tres mujeres -todas detenidas- como presuntas autoras materiales del brutal homicidio consumado en la vivienda de la víctima, ubicada en la manzana 27, casa 13 del barrio Simón Bolivar.
Una de las acusadas era trabajadora sexual, la otra ama de casa y la tercera vendedora ambulante, y todas conocían a la víctima y frecuentaban su casa.
En su resolución, el juez Caballero concluyó que luego de haber realizado un pormenorizado análisis conglobado de los elementos de convicción recabados durante el desarrollo de la investigación, y a pesar de haber evidencias pendientes de producirse, “entiendo que se ha alcanzado el grado de probabilidad exigido por el artículo 282 del Código Procesal Penal de la Provincia para resolver el procesamiento de las tres imputadas”.
En este razonamiento, el magistrado reconstruyó los hechos señalando que la noche del 17 y la madrugada del 18 de marzo de este año, las tres mujeres se presentaron en el casa de Amado Cáceres, en el barrio Simón Bolívar, (Manzana 27, Casa 13), a la cual ingresaron para celebrar porque el hombre había sacado la quiniela. En el transcurso de la madrugada y estando los cuatro dentro de la casa, se desató una discusión que desembocó en una pelea, durante la cual las mujeres atacaron a Cáceres lanzándole golpes en la cabeza, utilizando para ello una pava eléctrica y varios ladrillos. Producto de los impactos el hombre perdió el equilibrio y dio su cabeza contra un tubo de gas, lo que le produjo la muerte casi en el acto. La víctima quedó tendida en el suelo, en tanto las atacantes se retiraron del lugar, después de tapar el cuerpo con una frazada. Horas después volvieron a pasar por el lugar para observar que sucedía, siendo vistas por vecinos del lugar.
“Este hecho, se acredita porque de diversas testimoniales surge que las tres imputadas fueron vistas en la casa de Amado Cáceres la noche en que lo mataron, a la mañana siguiente mientras pasaban frente a su casa y por la noche en inmediaciones del lugar del hecho”, sostiene el juez Caballero, quien fundamentó su resolución en numerosas pruebas y evidencias que sindican a las tres mujeres como presuntas perpetradoras del violento homicidio.
En tal sentido, el magistrado explica que Amado Cáceres falleció a consecuencia de golpes en la cabeza que fueron efectuados por las tres acusadas, y ello se encuentra respaldado por el acta de constatación y secuestro de la Policía, el acta de necropsia y su informe, certificado de defunción y autopsia de la víctima, además de las declaraciones de los testigos que vieron a las imputadas en el lugar del hecho, reconocido a una de ellas y describiendo las características físicas de las otras dos, como también los dichos de estás últimas admitiendo lo ocurrido a testigos, que también declararon durante la investigación.
“Todas estas acciones desplegadas por las prevenidas, no me llevan a otra conclusión que el acto desarrollado por las mismas la madrugada del lunes 18 de marzo de 2024, fueron con el dolo requerido para el delito de homicidio, es decir con el conocimiento pleno y la voluntad de realizar una conducta dirigida a la producción de la muerte de otra persona, esto es, que estaban aplicando objetos contundentes sobre la cabeza de Amado Cáceres con intenciones de ponerle fin a su vida”, refiere el juez Caballero en la resolución de procesamiento con prisión preventiva de las acusadas.
A criterio del magistrado, las tres tomaron la vida de otro ser humano, quien además era conocido de las mismas y concurrían frecuentemente en su casa, y aprovechando esa confianza, tomaron una jarra eléctrica y pedazos de ladrillos para golpearle hasta dejarlo sin vida a Amado Cáceres.
“Como he referido anteriormente, no advierto en las imputadas ninguna causal de justificación, que pudiera eliminar el elemento de la categoría de la antijuricidad, ni la existencia de algún error invencible, que pudiera mejorar sus posiciones, para justificar semejante conducta”, enfatiza el juez de Instrucción, razón por la cual afirmó, siempre con el grado de provisoriedad propia de la presente etapa procesal, que las tres mujeres, objetiva y subjetivamente, incurrieron en la conducta reputable de Homicidio, en calidad de coautoras.
Sostuvo además que todo lo ocurrido tuvo lugar sin que hayan sido comprobados en el acto elementos propios que interfieran en la expresión de la voluntad, como así también, en la compresión de la antijuricidad; “inclinándose intencionalmente a la comisión del fin lesivo de la norma que conocían y comprendían perfectamente, entendiendo que en el presente caso las tres tenían el dominio del hecho”.
El delito de homicidio en el Código Penal Argentino estipula una escala penal privativa de libertad que va de 8 a 25 años de prisión.