Hay algunos datos de la inflación que empezaron a mostrar modificaciones en la última semana. Un trabajo privado alertó de una fuerte suba en el valor de los alimentos en la última semana del mes de octubre, siendo este un rubro clave para la idea del Gobierno de un IPC general a la baja. La referencia es para un trabajo de la consultora LCG, que reportó un alza del 1,7% en alimentos en la cuarta semana de octubre. El dato es fuerte no sólo por lo que representa nominalmente, sino porque viene de un deflación del 0,1 por ciento en el mes previo. Además, es particular porque se está dando en un marco de derrumbe histórico de las ventas, con porcentajes de bajas superiores al 20 por ciento.
En el detalle, se observa que los alimentos entre el jueves 17 y el miércoles 23 de octubre avanzaron 1,7%, que es la vez la variación más alta desde la primera semana de julio. Por este salto, la suba promedio mensual pasó a 2,3%, mientras que la medición «punta a punta» de cuatro semanas se ubicó en 3,3%. Visto por rubros, las subas que reportó LCG se centran en subas en frutas (5,7%), lácteos y huevos 4,6%, y bebidas e infusiones (4,2%).
En este contexto, es importante la cifra porque Alimentos es el rubro que pondera más del 20 por ciento del Indicador de Precios al Consumidor del INDEC. De hecho, estudios hasta la tercera semana de octubre alentaban la posibilidad de que la inflación de octubre se ubicara debajo de 3%, justamente por la estabilidad del precio de los alimentos.
¿Un cisne negro o una tendencia?
Vale aclarar, de todos modos, que LCG es la primera consultora que mide la cuarta semana y detecta una variación muy superior a las previas. Hay otro pelotón de consultoras que encontraron, en el mismo período, números diferentes.
Según un análisis del estudio de OJF y Asociados, la consultora de Orlando Ferreres, en las tres primeras semanas de octubre la variación de precios era de 2,1%.
Para PriceStats que dirige Alberto Cavallo, la inflación al 20 de octubre fue de 2,36%, que es el más bajo para los últimos tres años. Con datos hasta el lunes 20, desde Libertad y Progreso apuntan a una inflación de 2,7%, tras el relevamiento de unos 20 mil precios.
Por su parte, Equilibra publicó su trabajo con una variación de precios de 0,6% en la tercera semana de este mes. Esto significa un promedio de cuatro semanas de 2,9%, mientras que para todo el mes estaría en 3,2%.
En tanto, para Eco GO, que está a cargo de Marina Dal Poggetto, en la tercera semana del mes los alimentos registraron un incremento de 3,2% que permite proyectar una variación mensual de 3%. «El menor aumento en alimentos respecto a lo proyectado se compensó con aumentos mayores en otros rubros», señaló la consultora.
Precios altos con pocas ventas
Ante este número de LCG, lo particular es que se da en un escenario de desplome del consumo masivo de productos de la canasta básica. Es decir, hay aumentos en alimentos cuando el poder de compra no se está reflejando en mayores volúmenes de venta.
Según los cálculos de las consultoras Scentia y Nielsen IQ, en septiembre el consumo masivo cayó arriba de los 20 puntos, pero hay un detall interesante. En el rubro Bebidas, donde LCG registró las mayores alzas en los precios en la cuarta semana del mes de octubre, las caídas en las ventas son más cercanas al 30 por ciento que al 20. Si bien ya venía en baja el sector desde la temporada de verano, fuera de los mejores meses de venta volvieron a subir los precios.
Este diario consultó a diferentes referentes de los supermercados para saber si están viendo cambios bruscos de precios en las góndolas, pero la respuesta fue negativa. Que por ahora los niveles vienen estables, pero la medición de LCG no sólo reporta grandes comercios, sino también locales barriales.