La ola de calor extremo continúa golpeando a la provincia de Formosa, que desde ayer fue incluida nuevamente en la alerta roja por calor emitida por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN). La región está experimentando temperaturas insoportables, con el termómetro superando los 39°C y la sensación térmica (ST) alcanzando los 42°C, cifras que desatan la preocupación en una comunidad que parece estar acostumbrada a las altas temperaturas, pero que esta vez se enfrenta a un clima especialmente brutal.
Según el pronóstico extendido, la semana se presentará sofocante para los formoseños, con temperaturas que se mantendrán por encima de los 35°C durante los próximos días. La ola de calor parece no dar tregua y se espera que las condiciones extremas persistan hasta el fin de semana, sin señales de alivio en el corto plazo.
El calor, implacable
El calor intenso comenzó a sentirse desde ayer, cuando las temperaturas mínimas se ubicaron cerca de los 27°C y las máximas alcanzaron los 39°C, con picos de sensación térmica que llegaron hasta los 42°C. De acuerdo con el SMN, esta ola de calor es uno de los fenómenos más fuertes del año en la región, y se estima que las temperaturas seguirán elevadas por al menos toda la semana.
A lo largo de los próximos días, el calor no dará respiro. Las predicciones apuntan a que, durante los próximos cinco días, las temperaturas se mantendrán muy elevadas. Para los próximos días, el pronóstico marca lo siguiente:
Lunes: Mínima 27°C / Máxima 39°C
Martes: Mínima 25°C / Máxima 38°C
Miércoles: Mínima 27°C / Máxima 37°C
Jueves: Mínima 26°C / Máxima 36°C
Viernes: Mínima 25°C / Máxima 37°C
Como consecuencia de las altas temperaturas y la constante exposición al calor, la población formoseña enfrenta un aumento de riesgo, particularmente en grupos vulnerables como niños, ancianos y personas con enfermedades preexistentes.
El SMN emite
recomendaciones para
sobrellevar la alerta roja
En este contexto, el Servicio Meteorológico Nacional ha emitido una serie de recomendaciones para prevenir golpes de calor, deshidratación y otras complicaciones derivadas del calor extremo. A continuación, algunas de las sugerencias más importantes que se deben tener en cuenta durante estos días de alerta roja:
Evitar la exposición directa al sol: Es fundamental limitar la actividad física al aire libre y evitar la exposición al sol, especialmente durante las horas más calurosas del día, entre las 10:00 y las 16:00.
Mantenerse hidratado: Se recomienda beber abundante agua, incluso si no se tiene sed. Evitar las bebidas alcohólicas, con cafeína o demasiado azucaradas, ya que pueden aumentar la deshidratación.
Usar ropa ligera y de colores claros: La ropa suelta, liviana y de colores claros ayuda a que el cuerpo se mantenga más fresco y permita la transpiración.
Aire acondicionado y ventilación: Aprovechar la refrigeración de espacios cerrados con aire acondicionado o ventiladores, si es posible, para mantenerse en un ambiente más fresco. En caso de no contar con aire acondicionado, abrir las ventanas para permitir la circulación de aire puede ser útil.
Evitar bebidas alcohólicas y alimentos pesados: En días de calor extremo, es recomendable consumir comidas ligeras y evitar las bebidas alcohólicas, ya que estos factores pueden agravar los efectos de las altas temperaturas.
Protección solar: En caso de tener que salir, es crucial utilizar protector solar con factor alto, gafas de sol, sombreros o gorras, y buscar sombra siempre que sea posible.
Vigilancia en niños y personas mayores: Los niños pequeños, personas mayores y aquellas con enfermedades crónicas son los más vulnerables a los efectos del calor extremo. Se recomienda que estas personas permanezcan en lugares frescos y bien ventilados y reciban atención constante.
El impacto del calor
extremo en la salud
El calor extremo no solo es incómodo, sino que también puede tener efectos graves en la salud de las personas. Las altas temperaturas pueden desencadenar golpe de calor, deshidratación, agotamiento y complicaciones respiratorias. Especialmente en comunidades como Formosa, donde el calor suele ser una constante en verano, es importante prestar atención a las alertas del SMN y seguir las recomendaciones para prevenir incidentes.
La ola de calor también tiene efectos económicos y sociales. La energía eléctrica, por ejemplo, suele verse comprometida debido a la alta demanda de aire acondicionado, lo que puede derivar en cortes de suministro o restricciones. Asimismo, las actividades laborales y escolares se ven alteradas, afectando la productividad de las personas.
A medida que los días siguen su curso, las autoridades locales y provinciales reiteran la importancia de mantenerse alerta ante cualquier cambio en las condiciones climáticas y de seguir las recomendaciones de salud pública. Mientras tanto, los formoseños continúan luchando contra el calor abrasador, con la esperanza de que, pronto, la temporada de calor dé un respiro.
Un verano incesante
A pesar de ser una provincia acostumbrada a las altas temperaturas, Formosa parece estar atravesando uno de los veranos más rigurosos de los últimos tiempos. Si bien el clima cálido no es extraño en esta época del año, las alertas rojas del SMN han puesto en evidencia lo peligroso que puede ser el calor extremo y la necesidad de adoptar medidas preventivas.
El fenómeno climático también recuerda la urgencia de tomar medidas para mitigar los efectos del cambio climático en la región, que, según los expertos, cada vez genera fenómenos más extremos. La situación actual invita a reflexionar sobre el futuro de las comunidades y cómo adaptarse a estos eventos sin precedentes.