A medida que la tecnología transforma el mercado laboral y crea nuevas oportunidades y desafíos, diversas herramientas se posicionan en cada una de las industrias para marcar un diferencial. Esa tendencia es particularmente evidente en el mercado de bienes raíces, que continúa su crecimiento gracias al dinamismo que aportan los servicios inmobiliarios complementarios.
Vinculados con tecnología aplicada, marketing, negociación, gestión e inversión, se trata de servicios que les permiten a los corredores inmobiliarios enfocarse en el crecimiento comercial de sus oficinas. Existen tres grandes ejes en materia de servicios inmobiliarios complementarios:
● Experiencia de gestión de un modelo de negocio probadamente exitoso.
● Capacitación continua en marketing.
● Herramientas tecnológicas de vanguardia.
Esos instrumentos –que más que necesarios son vitales para la transformación del mercado y para poder responder a las nuevas exigencias de los consumidores– se erigen como los principales aliados de los profesionales de un sector que se ha vuelto fundamental para la economía argentina. De hecho, la última edición de la Encuesta de Expectativas de Empleo realizada por Manpower Group advierte que los empleadores argentinos anticipan una expectativa Neta de Empleo (ENE) de 0% para el segundo trimestre de 2025. Sin embargo, hay sectores que van a contracorriente. El sector Finanzas y Real Estate lidera las intenciones más sólidas de la muestra, con una ENE de +20%, seguido por Bienes y Servicios de Consumo (+9%), Industrias y Materiales (+9%) y Tecnología de la Información (+9%). Y es justamente la sinergia entre sectores como Bienes Raíces y Tecnología la que impulsa el desarrollo de los servicios inmobiliarios complementarios.
“En un contexto económico en el cual se desaceleró la inflación, el dólar se ha mantenido relativamente bajo pero los precios han aumentado fuertemente y no así los salarios en pesos, y en el que se proyecta una creación de empleo prácticamente nula para 2025, los servicios inmobiliarios complementarios a la actividad de inmobiliarias y corredores inmobiliarios —como los que ofrecen redes como RE/MAX, Coldwell Banker o Keymex— están marcando la diferencia”, explica Mariano García Malbrán, presidente de la Cámara de Empresas de Servicios Inmobiliarios (CAMESI). “Estas estructuras no sólo profesionalizan la actividad inmobiliaria, sino que también dinamizan el mercado laboral al brindar oportunidades concretas de emprendedurismo, desarrollo comercial y formación continua. Su modelo de negocio permite que cientos de personas se integren como agentes independientes, con el respaldo de una marca, herramientas tecnológicas y capacitación. Eso crea una red de valor que genera muy buenos ingresos en dólares a los agentes y sigue creciendo aún en tiempos de estancamiento general”, añade.
En línea con brindar mejores experiencias a los clientes y procesos más transparentes, la innovación tecnológica en el sector inmobiliario refuerza un cambio de paradigma al que cada día se suman más profesionales. La vanguardia se enmarca, asimismo, en un despegue exponencial de las fintech en Argentina. Tal como se desprende del último informe Finnovista Fintech Radar Argentina, el ecosistema fintech “mantiene su ritmo de crecimiento en número de empresas fintech locales hasta situarse en las 383 y sofistica su oferta de productos para satisfacer a un consumidor cada vez más exigente”. Y entre los principales catalizadores de la innovación está el segmento de proptech o servicios para bienes raíces.
Es, en definitiva, el impulso que aportan los múltiples servicios inmobiliarios complementarios –especialmente aquellos relacionados con las nuevas tecnologías– el que inyecta valor agregado al sector y le permite transformarse para hacer frente a los vaivenes coyunturales. A su vez, la expansión de los servicios inmobiliarios complementarios hace posible que los corredores cuenten con un respaldo en diferentes frentes y puedan enfocarse en hacer crecer comercialmente sus negocios.
por M.A.