Un informe elaborado con la colaboración de las Sociedades Rurales asociadas a ChaFor revela los acumulados de precipitaciones entre el 5 y 6 de mayo en distintos puntos de ambas provincias. La situación hídrica, dispar en todo el territorio, se suma a la ya crítica realidad económica del productor agropecuario.
Con la participación activa de las Sociedades Rurales de Chaco y Formosa y sus representantes territoriales, ChaFor presentó un informe detallado sobre las precipitaciones registradas entre el 5 y el 6 de mayo. El relevamiento, realizado en colaboración con productores agropecuarios locales, muestra una importante variabilidad en los registros de lluvia, con impactos desiguales y, en algunos casos, alarmantes.
En el sur chaqueño, Marina Biscay (presidenta de la Sociedad Rural de Presidencia de la Plaza) reportó un acumulado de 110 mm en la zona de Charadai, alcanzando los 120 mm en algunos predios rurales. En Villa Berthet, Eduardo (Sociedad Rural local) informó 130 mm, mientras que en Machagai se registraron 50 mm y en la zona sur apenas 20 mm, acompañando además un informe sobre mapa de alerta actualizado por la tarde. El productor y dirigente Diego Fernández, también desde Villa Berthet, relevó 210 mm en un campo que no había recibido precipitaciones en los últimos meses. Esta situación lo obliga a trasladar su hacienda a establecimientos vecinos ante la inutilización temporal de sus tierras.
Desde San Martín (Chaco), Nandy reportó lluvias por 110 mm. En Formosa, Carlos García, presidente de la Sociedad Rural de Pirané, indicó que en esa localidad cayeron 80 mm, pero en zonas cercanas como Palo Santo se alcanzaron los 360 mm, provocando anegamientos severos y dejando al pueblo prácticamente bajo agua. Por su parte, Mario Cabezas (presidente de la Sociedad Rural de Fontana) detalló precipitaciones dispares, con registros entre 20 mm y 200 mm en Perín. Los casos más extremos se dieron en El Bellaco y Potrero Norte, donde se reportaron hasta 600 mm, una cifra que supera ampliamente los promedios usuales y genera complicaciones severas para los productores.
En contraste, aún hay zonas con déficit hídrico. Desde Formosa hacia Clorinda persisten focos con falta de agua, aunque en el este de la provincia, especialmente en el Departamento Laishi, se relevaron hasta 140 mm.
Más allá del valor técnico del informe, los datos reflejan la compleja realidad que vive el productor agropecuario. A los desafíos climáticos se suman los problemas económicos estructurales del sector: presión impositiva, costos elevados y en algunos casos la falta de insumos básicos para la producción.
Por este motivo, ChaFor reitera sus solicitudes a los organismos nacionales, como el SENASA, respecto a la no obligatoriedad de vacunar categorías ya inmunizadas, y reclama medidas urgentes al Ministerio de Economía y a la Secretaría de Agricultura. Entre ellas, la baja de retenciones, la eliminación de impuestos distorsivos y una revisión del régimen previsional que afecta directamente a los productores.