Vecinos del barrio San Pedro manifestaron su preocupación por el prolongado apagón de las luminarias en varias calles de la zona, lo que —según señalan— incrementó la inseguridad y convirtió al barrio en un lugar propicio para hechos delictivos.
Uno de los sectores más afectados es la calle Güemes, entre Scozzina y Coronel Bogado, donde desde hace semanas los focos permanecen apagados. “No puede ser que se hayan quemado todos al mismo tiempo, lo más probable es que se los hayan robado, porque la cuadra entera está a oscuras”, sostuvo una vecina que vive en el lugar.
Otro residente afirmó que la situación genera temor al volver de noche: “Cuando salimos a trabajar temprano o regresamos tarde, tenemos que caminar con linternas del celular porque no se ve nada. Da miedo porque ya hubo intentos de arrebato en la esquina”.
También madres de la zona expresaron su malestar, ya que aseguran que la falta de iluminación pone en riesgo a los jóvenes que regresan de la escuela nocturna o de actividades deportivas. “Los chicos quedan expuestos, y eso como padres nos preocupa muchísimo”, comentó otra vecina del sector.
Delincuencia
Los frentistas coinciden en que la oscuridad favorece el accionar de delincuentes y genera una sensación constante de inseguridad. Por ese motivo, solicitaron la intervención urgente de las autoridades municipales y de las áreas correspondientes para reponer las luminarias y garantizar condiciones mínimas de seguridad en el barrio.
“Queremos que nos escuchen. No pedimos grandes obras, solo que arreglen las luces para poder vivir más tranquilos”, concluyó un vecino en diálogo con este matutino.