La crisis del peronismo ya no es solo de liderazgo, es de sustancia. Así lo define el referente cooperativista José Yorg, a quien entrevistamos, tras su reciente y comentada tesis sobre la necesidad de una alianza estratégica, ha decidido elevar el tono.
En esta entrevista, Yorg lanza una advertencia que ya resuena en las sedes partidarias de las provincias argentinas: La supervivencia del PJ depende de una «transfusión» inmediata de los valores y principios cooperativos a través del Partido Cooperativo Argentino (PCoop).
— Usted afirmó recientemente que el peronismo necesita al PCoop para restaurarse ante el pueblo. Hoy, con el escenario nacional aún más fragmentado, su recomendación suena a ultimátum. ¿Por qué ahora?
— José Yorg: Porque se acabó el tiempo de la especulación. El PJ hoy es una estructura que se está quedando sin herramientas de gestión territorial y enmarañada en luchas internas. El Estado nacional neoliberal avanza en su plan de empobrecimiento y los gobernadores están quedando aislados. Mi recomendación es dura porque la realidad es dura: O el PJ se abraza al cooperativismo POLÍTICAMENTE para reconstruir la economía desde abajo, o se quedan como una CÁSCARA VACÍA. Un partido sin pueblo y sin plan de desarrollo es solo un sello de goma que espera su certificado de defunción.
— Hablar de «abrazarse políticamente» al PCoop suena a una fusión de identidades. ¿Está pidiendo que el PJ ceda su conducción histórica?
— J.Y.: No, de ninguna forma, estoy diciendo que el PJ debe reconocer que el modelo de «puntero y plan social» fracasó. El cooperativismo político ofrece algo que el PJ perdió: capacidad de ejecución real. El PCoop sabe cómo organizar la producción, cómo gestionar servicios públicos sin fines de lucro y cómo crear empleo genuino donde el mercado no llega. Si el PJ provincial no atrae a los directivos cooperativos a sus mesas de decisión, se va a quedar en discursos aburridos, mientras la economía real pasa por otro lado.
— Usted menciona que sin esta alianza el PJ se queda «sin pueblo». ¿Cree que el votante peronista hoy encuentra más respuestas en una cooperativa que en el partido?
— J.Y.: Sin ninguna duda. La cooperativa es la que le resuelve la luz, el agua, el trabajo o el consumo al vecino en el interior. El pueblo es pragmático: va hacia donde hay soluciones. Si el PJ no incorpora el ADN cooperativo para proponer un plan de desarrollo local serio, la gente seguirá alejándose. La «cáscara vacía» de la que hablo es un PJ que tiene el discurso de la justicia social pero no tiene la herramienta para ejecutarla. El PCoop es esa herramienta.
— ¿Qué les dice a los directivos del PJ nacional que ven al cooperativismo como un sector «social» pero no «político-electoral»?
— J.Y.: Les digo que ese es su mayor error político. El cooperativismo es la política más pura que existe porque es la organización del pueblo para su propio bienestar. Mi recomendación a los gobernadores es que dejen de mirar hacia Buenos Aires esperando un milagro y miren hacia el PCoop en sus propias provincias. Ahí está el plan de desarrollo que les falta. La conveniencia es total: el PCoop pone la mística del trabajo y la transparencia, y el PJ pone la estructura política. Es la única forma de volver a ser una opción de poder real.
— ¿Es este un mensaje de salvación o una despedida?
— J.Y.: No, claramente es una hoja de ruta para la restauración. El peronismo tiene ahora una lúcida oportunidad de reencontrarse con su esencia. Pero que quede claro: sin el músculo del cooperativismo político el PJ no es más que un recuerdo. El futuro es asociativo o no será.
En el cierre de la charla, José Yorg es tajante para despejar cualquier duda sobre la posición del Partido Cooperativo:
«Que nadie se confunda: el PCoop no va a las provincias a pedir un lugar en la foto. El PCoop ofrece el modelo de desarrollo que el PJ ya no sabe cómo redactar. No es una súplica, es una oportunidad política de rescate institucional».
