El escenario político argentino ha vivido una de sus jornadas más trascendentales con la sanción definitiva del «Presupuesto General de la Administración Nacional para el Ejercicio Fiscal 2026». Tras maratónicas sesiones en ambas cámaras, el Poder Ejecutivo ha logrado obtener la herramienta legal que regirá los destinos económicos del país, bajo una premisa que se ha convertido en el mantra de la actual gestión: el déficit cero. Esta hoja de ruta no es solo un listado de gastos y recursos, sino una declaración de principios que prioriza el pago de la deuda y la estabilidad macroeconómica por sobre la inversión directa en infraestructura y programas sociales territoriales.
El Análisis Técnico: Variables que Marcan el Rumbo
El presupuesto aprobado se fundamenta en una estructura de ingresos y egresos que busca erradicar la emisión monetaria como método de financiamiento. Con una previsión de gasto total que asciende a los «$ 148 billones», el Gobierno Nacional ha diseñado un mecanismo de «cláusula gatillo» donde cualquier excedente de recaudación se destinará prioritariamente a la reducción de impuestos o al pago de intereses de deuda, asegurando que «el equilibrio fiscal sea la regla de oro de la economía argentina».
En términos de proyecciones, el texto legal sostiene una inflación del «10,1% anual» para diciembre de 2026, una meta ambiciosa que busca consolidar la tendencia a la baja iniciada en el periodo anterior. Asimismo, se proyecta un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del «5%», traccionado fundamentalmente por el sector agroindustrial, la minería y el sector energético de Vaca Muerta. Sin embargo, este crecimiento proyectado es visto con escepticismo por sectores de la oposición, quienes argumentan que «el ajuste en el consumo interno impedirá alcanzar las metas de crecimiento propuestas».
Impacto en Formosa: Las Cifras de la Discordia
Para la provincia de Formosa, el análisis de las planillas anexas revela una realidad compleja. La inversión real directa para el territorio formoseño muestra una concentración en obras de continuidad. El presupuesto asigna partidas por un total aproximado de «$ 12.000 millones», enfocados principalmente en el mantenimiento de la red vial nacional.
Entre los puntos más discutidos se encuentra la financiación de la «Autovía de la Ruta Nacional 11», una obra estratégica para la conectividad del Mercosur que ha sufrido constantes redeterminaciones de precios. El texto aprobado garantiza los fondos para los tramos que conectan con la capital, pero deja en la incertidumbre el financiamiento para las rutas secundarias y los accesos a localidades del interior. Según los analistas, «la obra pública ha dejado de ser una prioridad federal para convertirse en una variable de ajuste».
Voces desde el Congreso: El Testimonio de los Legisladores Formoseños
La representación de Formosa en el Congreso Nacional se dividió tajantemente durante la votación, reflejando las dos visiones de país que hoy se disputan el sentido de la gestión pública.
El Bloque del Justicialismo: «Un Presupuesto que Asfixia al Federalismo»
Los legisladores alineados con el gobernador Gildo Insfrán manifestaron un rechazo categórico. El senador José Mayans, en su rol de presidente de la bancada de Unión por la Patria, fue el orador principal de la oposición. En un discurso cargado de críticas hacia la visión centralista del presupuesto, Mayans señaló que esta ley es un ataque directo a las provincias. «Estamos ante un presupuesto que ignora la realidad del Norte Grande y condena a las provincias a la descapitalización», afirmó el senador durante la sesión.
Ademas. La oposición puso el foco en el recorte de los subsidios al transporte y la energía, que impactan con mayor fuerza en provincias electrodependientes como Formosa. En sus declaraciones tras la votación, remarcó que «el Estado nacional ha decidido desentenderse de la salud y la educación, delegando responsabilidades sin transferir los recursos correspondientes».
El Oficialismo y la Nueva Derecha: «Hacia una Economía de Inversión»
Desde la vereda del oficialismo, el senador Francisco Paoltroni defendió la sanción de la ley como el único camino para salir del estancamiento. Paoltroni argumentó que la transparencia en las cuentas públicas es lo que finalmente permitirá que lleguen inversiones privadas a Formosa. «El presupuesto 2026 termina con el modelo de la dádiva y comienza el modelo de la generación de riqueza», sostuvo el legislador, quien además instó a la administración provincial a reducir su propio gasto político para acompañar el esfuerzo nacional.
Detalles sobre Vivienda y Acción Social
Un punto que genera especial preocupación en la sociedad formoseña es la reducción del «40%» en términos reales de los fondos destinados a la construcción de viviendas sociales a través del Fondo Nacional de la Vivienda (FONAVI). En las últimas décadas, este fondo fue el motor de la urbanización en el Gran Formosa. Con el nuevo presupuesto, el Gobierno Nacional ha manifestado que «el crédito hipotecario privado debe reemplazar la asistencia directa del Estado en materia habitacional», una transición que los legisladores opositores consideran inviable para los sectores de ingresos medios y bajos del norte argentino.
Conclusión de la Jornada
La sanción del Presupuesto 2026 deja un sabor agridulce en la política formoseña. Mientras el oficialismo nacional celebra el blindaje del superávit, la provincia se enfrenta a un año donde deberá gestionar con recursos propios ante un Estado Nacional que ha decidido reducir su presencia territorial. El éxito de esta ley no se medirá solo en el control de la inflación, sino en la capacidad de las provincias para sobrevivir a «una reestructuración del Estado que no tiene precedentes en la historia democrática».
