Una mujer de 35 años fue víctima de un brutal homicidio en el partido de La Matanza, en el oeste del conurbano bonerense. El cuerpo de “Sofía”, como se hacía llamar Liliana Cháves, fue hallado en las últimas horas en una vivienda de la localidad de Virrey del Pino, boca arriba y rodeado de casquillos de bala. Le dispararon 17 veces. Solo seis dieron en el blanco, indicaron fuentes del caso.
El hecho ocurrió el pasado domingo cuando los oficiales acudieron a un terreno en la calle Newton al 900, entre Cárcano y Espejo, una zona precaria con calles de tierra de la ciudad. Los vecinos de la zona relataron que, momentos antes, habían escuchado disparos y vieron a un hombre huyendo con un arma en la mano.
Al llegar al terreno, donde funcionaban varias viviendas de alquiler, los efectivos detectaron a través de una ventana el cuerpo de Cháves. Estaba tendido boca arriba en el interior de la primera casa y había múltiples casquillos de bala en la escena del crimen, tanto dentro como fuera de la vivienda. La mujer no respondía a los llamados.
Fuentes de la investigación revelaron que los disparos se efectuaron desde el frente de la vivienda; de estos, seis impactaron en el cuerpo de la víctima. Por el homicidio, se sospecha de J.R., un hombre de nacionalidad paraguaya que podría ser su pareja, aunque el vínculo entre él y la víctima todavía no está claro. Tiene una orden de detención vigente y es intensamente buscado por las autoridades.
Las autoridades confirmaron que la víctima tenía antecedentes penales por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, tenencia ilegal de arma y homicidio, hechos por los que había sido condenada. La hipótesis de un robo quedó descartada: apuntan a un ajuste de cuentas, aunque el femicidio aún es una posibilidad.
Según se pudo reconstruir, Cháves vivía en la villa Zavaleta, en la Ciudad de Buenos Aires, y se había trasladado a Virrey del Pino en febrero pasado, ocultándose bajo el nombre de “Sofía”. De acuerdo con el testimonio de vecinos, era frecuentada por varios hombres, y el domingo del crimen recibió la visita de uno de ellos, ya identificado.
En la escena del crimen, se secuestraron cinco vainas en el exterior de la vivienda, doce en el interior y un millón de pesos en efectivo. Se cree que el agresor empuñó un arma cargada, introdujo la mano por una ventana y vació el cargador sobre la víctima. Personal del Grupo Táctico Operativo (GTO) continúa con las tareas investigativas.
Interviene en la investigación del crimen el fiscal Claudio Fornaro, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza.
En los últimos días, se registró otro homicidio en el conurbano bonaerense, presuntamente también vinculado a un ajuste de cuentas. El hecho ocurrió en Ingeniero Budge en la madrugada del sábado, cuando la víctima, identificada como Dylan Cortez (26), se encontraba en la esquina de Lavardén y Ayolas, perteneciente al partido de Lomas de Zamora.
Según fuentes judiciales le informaron al medio Diario Conurbano, un vehículo pasó por la intersección y, desde el interior, abrieron fuego contra Cortez. Dentro del auto, se cree que se trasladaban dos personas. Uno de los disparos efectuados impactó en el estómago del joven, que fue trasladado al Hospital Dr. Oscar Alende, pero falleció al poco tiempo de ingresar.
Por las cámaras de seguridad y los testimonios obtenidos, se pudo identificar a uno de los implicados. El agresor en cuestión es menor de edad y se desplegó un operativo para dar con su paradero.
El sábado por la mañana la vivienda de la víctima fue allanada en el marco de una causa por abuso de armas. Todo esto hizo que los investigadores consideren a un ajuste de cuentas como la principal hipótesis del crimen. Creen que estaría relacionado con la venta de drogas en la zona, que limita con ex Campo Tongui.
La investigación del homicidio de Cortez quedó en manos de la UFI 1 de Lomas de Zamora a cargo de la fiscal Carla Furingo.